MADRID. A menos de un mes para que las primeras primarias demócratas se den en la Isla, la campaña ausente de los candidatos (Hillary y Obama) es más intensa.
Pero la aparente ventaja que tienen los Clinton en Puerto Rico puede que tenga un efecto negativo durante estos días donde la Chelsea Clinton (hija de Hillary) y Michelle Obama (esposa de Obama) estarán de visita esta semana para hablar con los puertorriqueños sobre la importancia del voto para ellos que tendrá algun efecto futuro en las relaciones "gringo-boricuas".
Ya Bill y Chelsea han visitado la isla recientemente para continuar con la campaña. Sin embargo, la senadora por Nueva York todavía no ha pisado la isla para atraer el voto que tanto necesita. Por otro lado Obama si lo visitó pero mucho antes de la desición para celebrar un primaria demócrata en Puerto Rico.
Ahora, esta coincidencia hace evidente el deseo de Clinton para ser la candidata presidencial en el partido del Burro. Sin embargo, la participación de los puertorriqueños en estas elecciones no parece mover a muchos votantes que no entienden sus discursos en ingles. Esta situación crea que los candidatos vengan a la isla para interactuar con los puertorriqueños de las zonas más pobres, sector de la población que siempre vota por el que un alcalde le diga, como en el caso de los Clinton. Ellos han estado en las barriadas y caserios más desfavorecidos, como también en hospitales de niños con enfermedades difíciles como el cáncer.
Situación totalmente distinta a los Obama quien vendrá a separadas reuniones con los alcaldes de ambos partidos políticos en un rápida visita donde se espera que recuade $130.000 para su campaña.
De momento, todo es espectación entre los puertorriqueños que, a pesar de la campaña todavía es incierta la celebración de la primaria, ante la mal trecha campaña de Clinton quién no complació a los electores teniendo un reñida victoria en Indiana.
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