MADRID. Siempre se ha escuchado decir que la guerra no lleva a nada o haz el amor y no la guerra.
Irak es el nuevo Vietnam del siglo 21 y los que pagan son el pueblo iraquí y los soldados estadounidenses. Los relatos de los que han vivido la triste experiencia de matar inocentes no han sido los mejores. Entre los soldados se aprecia miedo y desesperación de pelear por razones que muchos no conocen. "Cuando será el día en que pueda salir de este infierno","no aguanto el miedo de estar pensando que hoy puede ser el día de mi muerte", estos han sido citas directas de algunos diarios de soldados, no mayores de 25 años, que han muerto recopilados en un reportaje del periodico The New York Times.
Estos pensamientos son los que en estos momentos existen en la guerra que Bush y sus secuaces han hecho para satisfacer sus intereses. Que pasará con esta generación de jóvenes que han perdido algun ser querido en la guerra. Las madres de estos hijos muertos sin necesidad. No se puede seguir viviendo en un mundo de miedo donde el dinero y unos pocos tuerzan la moral de un país y maltrate la diginidad de otro pueblo.
Nunca existirán beneficios asociados a las guerras y la locura de miles de jóvenes que en estos momentos se encuentran recibiendo tratamiento físico y psicológico a causa de los ataques de insurgentes iraquíes. Nadie sabe cuando acabará esta violación a los derechos humanos del pueblo estadounidense. Lo que se sabe hoy es que Estados Unidos sufre las peores consecuencias.
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